Es importante señalar que el actor protagonista, Matt Krentz (junto al jugador de color Jimmy McKinney que juega desde 2006 en los Frankfurt Skyliners de la liga alemana), es también el guionista y escritor de este largometraje, que está basado en hechos autobiográficos y biográficos de gente de su alrededor. Y es que Krentz, aparte de conocer el mundo del baloncesto callejero de la ciudad de Saint Louis, se encargó de reclutar a los mejores jugadores de la ciudad para aparecer en la película y de cuidar bastante la estética. Asimismo, las diferentes localizaciones relacionadas con el baloncesto callejero que aparecen, son lugares míticos para la gente que juega en las calles de la ciudad.
En lo referente a la historia, Streetballers aúna temas tan diversos como la problemática familiar, las drogas y alcohol, el racismo, la violencia y la delincuencia, utilizando la historia de dos chicos (uno de origen irlandés y otro negro) que se ven empujados a ayudarse mutuamente para lograr un objetivo común: jugar al baloncesto universitario como paso previo al profesional. Todo ello salpicado por apuestas ilegales y negocios turbios, partidos callejeros con los más diversos movimientos (y ausencia de defensa), armas, drogas y gangstas de las diferentes zonas de la ciudad con muy mala uva, y aderezado por una interesantes banda sonora a ritmo de hip hop (con temazo de Nelly y los St. Lunatics).
Lo dicho, Streetballers no estará entre las mejores películas de baloncesto de todos los tiempos (pese a sus diferentes premios en festivales de cine independiente), pero si tienes tiempo y te gusta el basket (en especial el Street) yo no dudaría en verla.
Habrá que echarle un ojo, desconocía este título. Te acabo de hacer un tweet ;-))
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